El 29 de septiembre de 1919, abría sus puertas la Clínica San Miguel, la primera clínica quirúrgica en Pamplona.
Fundada por los doctores Daniel Arraiza y Victoriano Juaristi, fue atendida en su origen por una comunidad de Hermanas Terciarias Carmelitas Descalzas. Su primera ubicación fue en el barrio de San Juan, donde llevó a cabo en sus dos primeros años más de 5.000 consultas y más de 600 intervenciones de todo tipo. La prensa de la época recogía: “Se ha instituido para el tratamiento de las enfermedades quirúrgicas como tumores, hernias, heridas, fracturas y dislocaciones, úlceras externas e internas, defectos de nacimiento y otras deformidades. También los partos difíciles que pueda necesitar de una operación”.
En 1976, con la voluntad de adaptarse a las necesidades de la sociedad, Clínica San Miguel es adquirida por Igualatorio Médico de Navarra. Con el fin de modernizar las instalaciones y satisfacer la demanda, se trasladarán a Beloso Alto, desde donde ofrecerían sus servicios a las 35.000 personas afiliadas de la época.
En 1978 fue colocada la primera piedra de la nueva Clínica San Miguel. El edificio, de ladrillo rojo y construido por Félix Pagola, entró en funcionamiento en 1980.